No quiero dejar pasar la oportunidad de compartir la magnífica conferencia a la que tuve el placer de asistir ayer en torno al cerebro y la creatividad. Bien conocéis mi afán por participar de forma inclusiva en la vida cultural de este Madrid y por aprender cuanto más mejor.
Pues bien, el doctor Ventura Ancios, jefe del Servicio de Neurología de los hospitales del Rosario y la Zarzuela nos ilustró, en el Instituto Petrarca acerca de conceptos tales como la inteligencia, el talento y el genio.
De las frases con que remarcaba los temas me quedo con ésa que dijo: "al cerebro le horroriza el vacío." El cerebro no quiere la inactividad ni el marasmo.
Insistió en la importancia de ejercitarlo con estímulos y retos continuos. Habló de la analogía de los caminos: un camino rural por el que circulen pocos vehículos, acabará por ser invadido por la maleza. En cambio, si el tráfico es denso, el camino se ensanchará llegando a constituirse en autopista.
Debemos buscar nuestro genio particular como algo que ponga en marcha toda la capacidad cerebral a base de empeño y tiempo, no debemos renunciar a intentar aquello que deseemos hacer so pretexto de no saber hacerlo, es difícil, etc. El cerebro pondrá en marcha millones de neuronas, canales de interconexión y procesos para alcanzar la magia del éxito.
Siempre me ha parecido increíble que en ese poco más de un kilo que pesa nuestra masa cerebral, se produzca tanto. Es indudable que la genética es el eterno principio, aunque el entorno efímero lo moldee.
Recomendó, en fin, una obra, sobre la que copio un enlace que la recoge. "Rituales cotidianos" de Mason Currey. Tiene muy buena pinta, la verdad.
http://www.elmundo.es/cultura/2014/02/10/52f7d3f0e2704ec6598b456a.html
Su lectura parece demostrar que ésos a los que consideramos genios, tienen unas manías y rutinas que los hacen humanos, alejándolos del carácter divino, que en alguna época pretérita se les atribuyó.
En definitiva,, actos como éste son de los que a mí me motivan, haciendo que la ceguera quede en segundo plano. Más aún, si acudo a ellos bien acompañado.
Buen viernes.
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Cada meta alcanzada es el inicio de un nuevo camino. Siempre adelante.
Saludos cariñosos
Alberto
8 comentarios:
Hola, amigos y amigas.
Tal vez me haga pesada siempre mostrando imágenes de mis manualidades, pero hoy me ha parecido interesante compartir con todo/as vosotros/as este escrito de mi amigo Alberto y, qué mejor que acompañarlo con mis últimos trabajos.
El cestito lo hice hace unos días con el fin de ponerlo en el mueble de la entrada para poner las llaves. Bueno, yo lo he hecho con ese fin, pero en realidad lo he hecho para trabajar las neuronas porque no sé estar parada y tampoco sé hacer otras cosas… bueno, mejor dicho, creo que hay pocas cosas que yo pueda hacer, pero si a alguien de los que pasáis por aquí me podéis enseñar alguna técnica nueva, os lo agradeceré mucho porque lo que yo quiero es eso, aprender cosas nuevas, jejeje.
Que tengáis feliz fin de semana.
Hola Piedad.
El articulo de tu amigo Alberto me parece muy interesante, y el ejemplo que ha puesto para acompañarlo muy bueno. La naturaleza y el cuerpo humano es muy sabio y lógicamente se tiene que estar activo para que las neuronas no se destruyan antes de tiempo, es algo que más o menos tenemos bastante claro, así que a crear muevas actividades no?
El enlace que has dejado a mi no se me ha abierto, lo volveré a intentar.
Tus últimos trabajos te han quedado muy bonitos, como todo lo que haces, así que ya sabes, a seguir trabando y creando nuevos técnicas.
Abrazos.
Rosa.
Muy interesante todo y para nada pesado mostrar cosas tan lindas que haces. Mantener la mente ocupada también aleja los malos pensamientos Mi terapia es tejer y con esos me entretengo y también ejercito mis neuronas. Beso y buen fin de semana
Piedad, tu cestito es muy bonito y la flores me encantan, una verdadera pasada.
El artículo está muy bien. Es algo que todos sabemos y que ya hemos comentado muchas veces, lo que tenemos es que seguir poniéndolo en práctica.
La técnica de los canutillos ya sabes que engancha y que salen cosas preciosas. Yo sigo con ellos, no puedo dejarlos, jaja. Ahora los pinto antes de tejerlos y quedan muy bonitos los trabajos.
Tengo que decirte que busqué esparto en Madrid y lo encontré. Paco se empeñó en que comprara un manojo y aquí lo tengo. A ver ahora cómo le meto mano. Pensaba llamar a tu hermana Carmen a que me orientara, jeje. Ya te contaré. Lo de la pleita es un reto que me pusiste tú a mí!
Un abrazo grande, amiga. No dejes de escribir ni de hacer todo lo que se te ocurra.
Conchi
¡Hola a todas!
Rosa, quizá el enlace tenga algún problema y no se pueda abrir, pero creo que con los ejemplos que puso el neurólogo hay suficiente, aunque todo eso ya lo sabemos de siempre. Ahora falta llevarlo a la práctica, como dice Conchi. Pero si se quiere se puede.
Beatriz, yo también tejía antes, pero no me va bien para las manos, así que cambié de sistema. Pero tejer también es una buena terapia, porsupuesto. Así que a tejer, jejeje.
Conchi, yo te puse el reto de la pleita, pero mi hermana te orientará mejor que yo, sobre todo el comienzo ya que ella hacía muchas. ¡Ese era su trabajo, yo solo miraba y era tan pequeña...!
A mí me dan ganas de hacer algo con pleita, pero tal como se hace con esparto. Es decir, con nuetrece ramalespero de periódico que se trabaja mejor. Eso de pintar los canutillos antes de tejerlos me parece una buena idea pero para mí lo veo difícil.
Bueno, pues nada, seguimos dándole al coco que el que no le da, trabaja poco. Jejeje.
¡Me ha salido un pareado sin pensar!
Abrazos para todas.
El artículo de Alberto me ha encantado, es muy interesante y creo que tiene mucha razón, a mi cerebro, por lo menos, si que le horroriza el vacío.
Piedad, el tuyo está lleno de talento.
El cesto y las flores son preciosos!!!
Un abrazo fuerte
Piedad,tienes mucha imaginacion, y lo haces muy bien todo,porque yo soy una vaga que no hago nada, solo miro lo que haceis las demás.
Un beso, Isabel.
Blanca, a tí te pasa igual que a mí, nuestro cerebro necesita actividad y hay que hacerle el gusto, jejeje.
Isabel, si estuviéramos más cerca ya haríamos cosas juntas y dejarías de ser baga, jejejeje.
Os dejo un fuerte abrazo.
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