El texto de este cuento ya lo conocéis, pero ahora quería presentaros con la ayuda de mi informático, las ilustraciones hechas por mi.
-¡Abuelito! ¿Estás triste? -Preguntó rebeca un tanto extrañada por la expresión que mostraba el rostro de su abuelo. Éste observaba a la niña y por unos instantes se dejó ir por los recuerdos de su infancia.
-No bonita, no estoy triste, solo pensaba.
-¿Y qué pensabas abuelo?
-Nada importante hijita, son cosas de mi infancia. Tú me has hecho recordar cuando yo era como tú.
-¿Tú también eras travieso como yo?
El abuelo rió con ganas.
-¿Tú eres traviesa?
-Eso dice mamá, yo le oí decir a papá, “la niña sólo es traviesa”.
El hombre seguía riendo por las ocurrencias de la niña mientras la estrechaba entre sus brazos. Rebeca insistía.
-¡Dime qué pensabas abuelo! ¡quiero saberlo!
-Ya te he dicho que no es nada importante. Son recuerdos de cuando yo vivía en la huerta con mis padres.
-¿tú tenías una huerta?
-sí, claro, en ella mi padre sembraba de todo.
-Yo quiero ir a tu huerta, ¡quiero ver lo que sembraba tu padre!
-Me temo que eso no va a poder ser.
-¿por qué?
-Pues porque en su lugar ahora hay un bloque de viviendas -contestó el abuelo con tono nostálgico.
-Pues cuéntame lo que hacías.
La niña cogió una silla y se sentó frente al abuelo dispuesta a oír las aventuras que éste le contaría de la huerta y su infancia. Orgulloso de ello, dio rienda suelta a sus recuerdos y a sus aventuras en el campo. La niña lo escuchaba con atención sin perder detalle alguno.
Punto por punto, el abuelo fue pasando páginas de aquellos tiempos tan lejanos y al mismo tiempo tan presentes para él.
-Yo le ayudaba a plantar los tomates, los pimientos, los pepinos, las lechugas etcétera. Cogíamos la fruta directamente del árbol, la lavaba y me la comía allí mismo, pero lo que más me gustaba era regar las hortalizas porque me metía en el agua. Mi madre se ponía hecha una fiera, porque me ponía hasta los ojos de barro, pero yo disfrutaba como un cerdito en un charco.
-Jajajaja -reía Rebeca-. ¡Abuelito, yo quiero tener una huerta! ¡Quiero ver los tomates y todas esas cosas!
Pasó un tiempo, pero a rebeca no se le olvidaba los cuentos de su abuelo y siempre insistía en que quería tener una huerta o un campo. El día de su cumpleaños, sus papás le hicieron una fiesta y le dieron un regalo. Su papá le regaló un libro titulado “las aventuras del gato y el ratón”, su mamá le regaló un juego de letras, su abuelita un cuaderno para sus apuntes.
-abuelito y ¿tu regalo? ¿Tú no me regalas nada?
-Sí, tengo una sorpresa pero ya sabes que es un regalo que tienes que compartir con tu hermanito. Ahora Javier es pequeño, pero crecerá y también querrá hacer lo mismo que tú.
-¿qué es abuelo? ¿Dónde está mi regalo? ¡Quiero verlo!
-tranquila, no te impacientes. Para poder ver tu regalo tenemos que salir de la ciudad.
Rebeca, loca de alegría, cogió a su hermano de la mano y juntos corrieron hacia el coche para que les llevaran a ver su regalo. Cuando estuvieron en el lugar, su abuelo le mostró señalándole con la mano.
-Este es tu regalo.
-¡pero abuelito, aquí no hay nada, solo hay tierra! ¡Me has engañado! -Exclamaba casi llorando.
-No cariño, yo no te he engañado. Este es el campo para hacer la huerta. Yo te voy a enseñar como hacerlo y tú harás tu propia huerta.
-¿De verdad?
-¡Claro que es verdad!
Labraron y abonaron la tierra, plantaron los tomates, pimientos, etcétera y bordearon la huerta con una hilera de árboles frutales y entre los mismos plantaron flores de todos los colores con las cuales daban un aspecto maravilloso de hermosura y belleza. Y así Rebeca y Javier supieron como sembrar las hortalizas, apreciando el valor y la riqueza de la naturaleza.
FRESCAS Y SABROSAS RECIÉN COJIDAS DE LA HUERTA
Autora: Piedad Martos
22 comentarios:
Este es uno de los dos cuentos que le regalé a Lorena en su primera comunión y aprovechando hoy que ha venido mi informático para otra cosa, he querido compartir con todo/as vosotros/as la ilustración, que como ya os dije es obra mía (lo digo como si fuera de verdad una obra de arte), pero sabéis muy bien que está hecho con cartulinas de colores. Sé que no tiene valor, pero también sé que os hacía gracia de verlo y es por eso que os lo presento con la ayuda de Joan, pues para mí es imposible poderlo subir.
Mientras Joan me hacía el trabajo hemos hablado de Nuria Fergó y de su nuevo disco “Tierra de nadie”, ya que es un gran admirador de ella, tanto que a mí también me ha contagiado. Por eso, desde aquí le mando un saludo y le deseo que tenga mucha suerte con su nuevo disco ¡Y que venda mucho!
Besos para todos los visitantes a este espacio.
que maravilla, piedad!!!!!!!!
claro que es una obra de arte y tiene muchísimo valor, no lo dudes!!!!!!!!!!
te felicito por tu fuerza y tus ganas!!!!!!
un super abrazo, reina
Clap, clap, clap (estos son aplausos). No solo son hermosos tus dibujos sino que tienen la fuerza de la simplicidad y la textura del material los hace sôlidos y contundentes!!
Gracias por regalarnos este prodigio. Los disfruto tanto o mâs que tu cuento!!
Un abrazo grande,
Iris
Como ya te comenté, me parece un regalo entrañable y precioso.
Un beso
Piedad, qué maravillaaaaaaaa. Me han encantado tus ilustraciones!!! El cuento ha quedado precioso, ya era bonito y contenía un gran mensaje, ahora contiene otro más: "poder es querer".
Cuántas veces los niños nos dicen en la escuela "yo no puedo, yo no sé.." ¿pero tú quieres?, tendríamos que preguntarles, ¡pues inténtalo verás como puedes!
Gracias, amiga, por tus lecciones de superación y de amor a la vida.
Te felicito de corazón.
Un abrazo grande
Conchi
Piedad, me he quedado asombrada de todo lo que consigues hacer.
Ha quedado precioso.
Un beso
hola, me ha gustado mucho!! el cuento... es precioso y las imagenes... sin palabras, me alegro mucho!! un besito
Piedad, seguro que Lorena guarda tus cuentos como un tesoro.
Las ilustracines ¡¡¡GUUUAU!!¡Preciosas!
Un abrazo
Como bien sabes hace días que no ando por los blogs, mis pensamientos están ocupados. pero Sabía que ibas a poner tus creaciones y no puedo perdermelas. Asi que entro y me admiro de tu gran fuerza de tu entusiasmo de tu ilusión de no parar quieta y siempre tener la mente y las manos ocupadas.Tienen toda la frescura de las cosas hechas con el corazón. Muy bonito Piedad.
Un an¡brazo
He vuelto otro ratito para disfrutar de tus trabajos . De verdad que me causas verdadera admiración
Un beso
¡Buenas noches Piedad! no dejas de sorprenderme y puedes creer que esto que hiciste no es una obra de arte, sino que es una GRAN obra de arte, tus manos ven lo que el destino quiso que tus ojos no hicieran y de verdad hay que felicitarte por tu superación en todos los aspectos.
Abrazos.
Mi querida amiga,
Que regalo más bonito le has hecho a Lorena!
Te felicito, pues la ilustración es una preciosidad y yo te lo digo así de claro:
Es una obra de arte, claro que lo es!!!
Como que no tiene valor????????
No digas eso nunca más eh? Tiene muchísimo valor, Piedad, pero mucho.
Un gran abrazo
Mariaisabel
¡Gracias, gracias, gracias! Muchas gracias a todas por vuestras palabras. La verdad es que vuestros comentarios es un estimulante de lo más eficaz, entrar aquí y leeros es un placer además de un buen relajante. Pues hay días en los que una se siente tristona y con la moral algo baja, debe ser el tiempo... el caso es que leyendo estas cosas tan bonitas levanta el ánimo... Abrazos y feliz fin de semana para todas.
que bonito cuento LO QUE SON LOS ABUELOS Y LOS NIETOS ..ES LA SALSA DE LA VIDA.Y LA INOCENCIA DE DE LOS NIÑOS...
gracias Piedad que te guste mi poesia.te lo agradezco mucho.
no me va muy bien el ordenador estos dias.
besitos
Marina
Muy emotivo tu cuento y a la vez tambien original y apasionante, seguro que a la Lorena le habra gustado un monton. En cuanto a las ilustraciones no se como lo haces .Yo soy vidente y no sabria como hacerlas.Ya veo que no paras de escribir.Tu vales mucho y no te falta humor cosa de admirar en estos tristes tiempos que corren.Un abrazo muy fuerte.Y tu no pares, sigue,sigue,,,.
Desde el blog en apoyo al “Premio Maria Amelia López Soliño” a la mejor bitácora escrita por una persona de la tercera edad, te agradecemos el cariñoso comentario de condolencia dejado en su blog y te animamos a seguir con el tuyo.
Un saludo afectuoso.
Me han gustado mucho tus dibujos. Como sabes yo también soy aficionada a pintar, así que tenemos una afición en común.
Eres admirable.
Un beso
gracias Piedad de que te gusten mis poesias,me alegra que puedas entrar a leerlas y la musica a veces la bajodel todo pero no debe dar la coincidencia cuando entras tu.ahora hay una que es historica de cuando los Romanos que Tarragona aun conserva el anfiteatro y los pasillos de las jaulas de leones.Te dejo besitos
MARINA
Marina, Conchita, Familiar de M Amelia, Pura, a todas os doy las gracias por vuestra visita y vuestros comentarios...
A Pura le digo que yo no pinto, pues ni tan siquiera veo los colores de las cartulinas. Para hacer las ilustraciones tengo que marcar cada una de ellas con el color correspondiente y darle la forma al dibujo conforme voy recortando, por eso no es perfecto... Pero así mato el tiempo libre y me distraigo con ello al tiempo que trabajo la mente y me concentro en algo positivo, cosa muy necesaria para prevenir...
A todas un beso.
Hola Piedad!!! me has dejado boquiabierta cuando he visto la ilustraciones que nos enseñas, me han parecido deliciosas, tienen ese encanto especial de lo genuino y al mismo tiempo fuerza para captar la atención de quien las mira por su dulzura y su colorido.
Una delicia Piedad,
Abrazos!!!
Hola, Piedad. He pasado a saludarte. Ando fatal de tiempo, pero quería que supieras que no me olvido de ti!!!
Un abrazo, amiga.
Conchi
Piedad:me alegro que te decidieras a enseñarnos lo que haces con tus cartulinas de colores, ya sabes que te admiro desde que vi tus gallinitas ¿te acuerdas?.Felicidades.
Te escrivo des de la clase de informatica pues tengo el ordenador estropeado.
Enhora buena por el cuento y los dibujos, un beso
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