sábado, 28 de mayo de 2016

UN CUENTO.

EL FRACASO.

 

¿Realmente, Ángel era un fracasado?

Eso era lo que él pensaba después de realizar su sueño con poco éxito.

 

Desde que era un niño, la vida de Ángel estaba llena de sueños, imaginación y fantasía con los que dejaba ir sus pensamientos y viajar por toda la tierra, viviendo virtuales aventuras increíbles. De esta manera pasó de la infancia a la adolescencia y de esta a la juventud, que poco a poco fue madurando pero siempre con aquella ilusión de ver hecho realidad su sueño… Es decir, viajar y vivir en contacto con la naturaleza. Conocer de cerca todos los animalitos del planeta, los insectos y las flores. Para ello, el joven necesitaba dos cosas elementales. Dinero y tiempo, cosa que no tenía, por lo que nunca pudo hacerlo.

 

Pasaron los años y el joven ya no era tal, pero aunque iba sumando años en su mochila, entre ellos todavía mantenía aquel deseo inolvidable y las fuerzas necesarias para atreverse a iniciar su aventura, consciente de lo que ello conlleva. Sacrificio, tiempo, dinero y quizá hasta podría llegar al fracaso si su trabajo no fuera reconocido ante los medios de comunicación.

Aun así, se lanzó con su proyecto.

Empezó a hacer excursiones por los lugares que a él más le atraían, buscando el terreno adecuado para su trabajo.

En una pequeña caravana, se montó un mini equipo con una cámara fotográfica y grabadora de vídeo, un ordenador portátil y un móvil, con el que iniciaría el sueño de su vida.

Textos, vídeos y fotografías con hermosos paisajes fue el fruto de varios años de observación y estudio, con los cuales montó una serie de documentales en los que mostraba la vida diaria de aquellos seres vivientes, dignos de admirar.

Lo tenía todo preparado para publicarlo. El montaje era perfecto y la presentación muy llamativa. Quien lo vio, lo felicitó valorando la labor de su trabajo, pero de ahí no pasó y Ángel se quedó con su sueño metido en una caja, esperando que alguien, algún día, se decidiera a publicarlo.

Pero ¿lograría llegar a su meta?

 

 

Piedad Martos.

4 comentarios:

Piedad dijo...

Un cuento que podría ser tan real como la vida misma.
En esta vida hay éxitos y fracasos, sueños cumplidos y sueños sin cumplir y vidas que se alimentan de la ilusión, porque soñar no cuesta dinero.
Mantengamos pues, la ilusión de nuestra vida y alimentemos con ella su existencia.

Abrazos.

PEPE LASALA dijo...

Así es Piedad, la vida se alimenta de ilusión. Precioso cuento amiga, me ha gustado mucho. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala

rosa mis vivencias dijo...

Piedad, creo que en esta vida hay muchas personas con las mismas ilusiones que Ángel, así que como dices podría bien ser real, ojala nunca perdamos esa ilusión que ya desde niños llevamos, y soñamos para que se se cumpla.

Un beso.
Rosa.

PEPE LASALA dijo...

Por aquí paso de nuevo Piedad, para saludarte y desearte buen fin de semana. Un fuerte abrazo amiga. @Pepe_Lasala